Neurocirugía pediátrica
¿Qué son?
¿Qué es?
La neurocirugía pediátrica es una rama especializada de la medicina que se dedica al diagnóstico y tratamiento quirúrgico de trastornos neurológicos y craneales en niños y adolescentes. Estos trastornos pueden variar desde malformaciones congénitas hasta lesiones traumáticas y tumores cerebrales. La neurocirugía pediátrica requiere un alto nivel de experiencia y cuidado debido a las diferencias anatómicas y las necesidades específicas de los pacientes jóvenes.
¿Cuándo acudir al especialista?
Saber cuándo acudir a un especialista en neurocirugía pediátrica es esencial para el diagnóstico y tratamiento oportunos. Aquí hay algunas situaciones en las que se debe considerar la consulta con un especialista:
Malformaciones congénitas: Si tu hijo ha nacido con una malformación cerebral o craneal detectada en una ecografía prenatal o después del nacimiento, es importante que sea evaluado por un neurocirujano pediátrico para determinar el mejor enfoque de tratamiento.
¿Cuándo acudir al especialista?
Epilepsia resistente al tratamiento: Si tu hijo tiene epilepsia que no responde adecuadamente a los medicamentos, la cirugía puede ser una opción para controlar las convulsiones y mejorar su calidad de vida.
Tumores cerebrales: Si se diagnostica a tu hijo con un tumor cerebral, un neurocirujano pediátrico trabajará en conjunto con oncólogos pediátricos para planificar y llevar a cabo la cirugía necesaria, si es apropiada.
Lesiones traumáticas: En caso de lesiones craneales traumáticas en niños, especialmente si se sospecha daño cerebral, se debe buscar atención especializada para evaluar y tratar cualquier complicación.
Hidrocefalia: Si tu hijo presenta síntomas de hidrocefalia, como una cabeza que crece anormalmente rápido, irritabilidad o cambios en la coordinación, es esencial que un especialista en neurocirugía pediátrica evalúe su condición.
Los neurocirujanos pediátricos son expertos en el diagnóstico y tratamiento de afecciones neuroquirúrgicas y craneales en niños y adolescentes. Utilizan técnicas avanzadas de imagen, cirugía mínimamente invasiva y terapias personalizadas para abordar las necesidades específicas de cada paciente joven. La atención centrada en el niño, el apoyo a las familias y la colaboración interdisciplinaria son pilares fundamentales de la neurocirugía pediátrica, garantizando el mejor resultado posible para los pacientes jóvenes y sus familias.